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lunes, 13 de octubre de 2014

Situaciones 374

"Una aportacion de El hijo que mira"

Tengo un problema. Cada vez que veo una persona detrás de unos cristales se me pone la polla tiesa e incluso a veces me corro. Posiblemente fue por una experiencia que tuve cuando era pequeño y vi cómo un hombre se follaba a mi madre detrás de unos cristales. Todavía recuerdo cómo se aplastaban una y otra vez sus tetas contra los cristales.

 

5 comentarios:

Anónimo dijo...

A mi me ocurre lo mismo con los pepinos. Entró en una frutería, los veo y me corro como un loco. El motivo es que pille a mi madre masturbándose con un pedazo pepino.

Anónimo dijo...

Me encantan las tetas gordas, me las comería a todas y más si son de una rubia calentorra.

Anónimo dijo...

¿En que se parece tu madre a una cucaracha? Que a las dos hay que matarlas a polvos.

Anónimo dijo...

Yo también vi así a mi madre y dejó los cristales relucientes, y es que no hay mejor limpieza que la que se hace restregando las tetas.

Anónimo dijo...

Mi mamá limpia todo con las tetas, los cristales, la mesa, todo. ¿La vuestra no?