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lunes, 13 de octubre de 2014

Situaciones 375

"Una aportacion de El hijo que mira"

Nos fue imposible rehusar a dar un paseo en un yate de un amigo de mi padre.
Estabamos admirando el paisaje desde la proa cuando me di cuenta que mi madre no estaba, así que me fui a ver donde estaba.
Y la encontré, en la popa de la embarcación, y no estaba precisamente admirando el paisaje, aunque yo si disfruté de la visión de sus curvas.
 
 


5 comentarios:

Anónimo dijo...

Contra el mareo no hay nada mejor que un buen polvo.

Anónimo dijo...

Te voy a quitar a tu madre. Que curvas y como se menea

Anónimo dijo...

Como se llama?

Anónimo dijo...

En la popa del barco a tu madre se la metieron por la popa. Es lógico.

Anónimo dijo...

Ya no dejó tu madre de ir en barco y siempre que podían se la follaban.