Tu madre era diferente. Estaba en otra liga. Era una mujer profesional. Una dama de categoría y clase. Destacaba entre las demás madres.
Como siempre no faltaba el odioso que decía vulgaridades sobre ella y tu la defendías protegiendo su honor.
"Mi madre nunca haría eso. Ella es diferente."
Pues lamento decirte que sí. Tu bella y distinguida madre también sucumbe a sus deseos mas básicos.
2 comentarios:
Es una realidad, muchas veces las mas recatadas son las mas putas
Era obvio que sucumbiría,a ese macarra de tu amigo solo le basto con enseñarle su descomunal polla para tenerla de piernas abiertas.
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