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jueves, 16 de julio de 2020

El club de golf


Hace unos años entendí que nada era gratis en la vida. Era pequeño aún pero fue una gran lección de vida.

Resulta que el golf era un nuevo entretenimiento para mi padre. Sabía que pertenecer al club era algo necesario para escalar socialmente y estaba dispuesto a pagar cualquier precio. Todo parecía ir bien, empezaba a codearse con importantes profesionales que podrían serle de gran ayuda. De a poco fueron estableciendo confianza. Compartieron algunas cenas en donde fue acompañado de mi madre. Ella no pasó inadvertida, uno de aquellos hombres, un abogado muy importante no le sacaba el ojo.

Al finalizar la cena le dijeron a mi padre que ya estaba apto para el ritual de iniciación. Pertenecería al club y tendría muchas influencias y oportunidades tan solo debía dar algo a cambio. En caso de aceptar debía presentarse este domingo al club y en caso de declinar la oferta no debía presentarse mas.  Noté pensativo a mi padre esos días. Invitó a mi madre al club, aunque ella no quería ir, insistió en que yo me quedase con mi abuela. Cuando se subió al auto vio que yo estaba ahí. Mi madre me quería llevar a toda costa así que no pudo hacer mas nada.

Al llegar al club de golf vi a aquel tipo que habló con mi padre el otro día. No se porque pero no me caía bien. Después de un breve partido o no se que estaban jugando se reunieron a hablar. Mi padre llamó a mi madre para que se acercase a jugar un partido. Aquel tipo la saludo y se fueron sumando dos mas. Luego de eso  él me llevó a un lugar apartado. Nos fuimos a un comedor a tomar algo. No encontraba a mi madre pero el me dijo que mama jugaría un partido con esos señores y que no me preocupase por eso.
En un momento que se descuidó salí de ahí y volví hacia donde estábamos antes. Me asomé con cautela entre los arbustos y lo que ví me dejó helado.


A pesar de ser chico yo ya había conocido la paja y sabía perfectamente lo que le estaban haciendo a mi mami.



Tenía una polla bastante grande en la boca, con la mano izquierda meneaba otra y todo esto mientras montaba otra verga. Se me rompió el corazón. No podía creer que mi madre estuviese haciendo eso. Pensaba que eso solo lo hacían las chicas de los videos porno. No las madres.
Muy afligido voltee para irme. Ellos continuaban follando a plena luz del día. No se divisaba a nadie mas alrededor. Escuche unos gritos. Eran de ella, algo me hizo volver. Tal vez le estaban haciendo daño.



Lo que vi me sorprendió aun mas. Ahora otro estaba reclamando su culo. Le iban a meter sus penes al mismo tiempo. Me desagradaba pero no podía dejar de observar. Siempre escondido.


Disfrutaban mucho a mama mientras ella recibía complacida las embestidas. Uno de los tipos le puso la polla en la boca para callar un poco sus jadeos.


Se fueron turnando. Todos llegaron a probar su coño y su culo. 


No tardaron mucho en correrse en su boca. No podía creer que mi madre era como una puta del porno. Me estaba por retirar cuando vi a mi padre acercarse. Me escondí dentro del arbusto. El fue directo hacia donde estaban ellos. Iba a descubrir que mi madre fue infiel!



"Mira quien ha venido. Muchas gracias por compartir a tu esposita. Mira como le dejamos el culo jaja. "

"Felicidades. Ya ere parte del club" 

" Si, felicidades"

Mi padre había pagado un alto precio y eso que había dado a cambiar era mi madre.









1 comentario:

Anónimo dijo...

Muy bueno y morboso,gracias.